miércoles, 23 de marzo de 2011

A las madres de Mayo ...


Te busca madre mientras su cuerpo es mecido
por el mar en el que se sumerge dormido.
Sueña tu abrazo, busca recuerdos,
a los que aferrarse para no conciliar el sueño.

El mar se inquieta, es tempestad, lamento.
¿Quién pudo lanzar mil ángeles desde el cielo?
Y oye tus gritos, blancos pañuelos,
cubren sus aguas, los trajo el viento.
Manda una ola para que se lleve
a los traidores que sembraron tanta muerte
.

Barcos y náufragos oyen sus voces.
Les dicen "Nunca, nunca, olviden nuestros nombres".
Díle a las madres que en algún lado,
donde hace falta, seguimos luchando.

Madre, tu hijo no ha desaparecido.
Madre, que yo lo encontré andando contigo.
Lo veo en tus ojos, lo oígo en tu boca,
y en cada gesto tuyo me nombra.
Lo veo en mis luchas y me acompaña
entre las llamas de cada nueva batalla
.

Guían mis manos sus manos fuertes,
hacia el futuro, hasta la victoria siempre.
Guían mis manos sus manos fuertes,
hacia el futuro, hasta la victoria siempre.

Ismael Serrano.



¡MADRES DE LA PLAZA, EL PUEBLO LAS ABRAZA!
Jamás podrán apagar sus voces, ni las almas de los 30.000 jovenes, que, donde quiera que estén, siguen mostrándonos el camino hacia una Argentina más justa.
Por ellas, por sus hijos, por los nietos y por los que han perdido la vida, es que debemos seguir culpando y pidiendo justicia para que los responsables civiles y militares de este genocidio de estado sean guardados de por vida tras las rejas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario